viernes, 9 de octubre de 2009

Deus Machina

La nube de los desperdicios vuela ahora sobre todo el mundo, nada, absolutamente nada es infalible, nada. Todo debe caer, todo debe extinguirse, primero fueron los mounstros marinos, le siguieron los dinosaurios, enormes barcos de carne y hueso flotando por el mundo que aún se besaba en cada una de sus costas. Después fueron las aves gigantescas las que cayeron de los cielos a pudrirse en la tierra, enormes mamíferos colmaron el planeta, aun más tarde puntas de hueso, lanzas arrojadizas con puntas de silex, cazadores recolectores y posteriores agricultores, luz de las estrellas, en casi un día y una noche: pirámides y templos escalonados hacia el cielo, nuestro primer desafío a los dioses cuando aún habitaban en selvas y desiertos, antes de que marcharan al cielo a cobijarse entre las estrellas y el polvo de la memoria de la tribu de los bípedos. Tiranías hidráulicas. Ejércitos se levantaron y ríos de sangre se vertieron en las llanuras y frente a enormes muros de deliciosas ciudades cuya bruma aún llega a nuestras camas por la noche. Reyes, emperadores, hombres capaces de conquistar el mundo. Sodoma y Gomorra nos enseñaron los placeres de la carne y el terrible temor divino abandono la eternidad para introducirse en la historia y aniquilar los focos urbanos de la humanidad hecha carne. Faraones, Rey de reyes, hombres maquillados como mujeres cubriendo al mundo de dos centímetros de sangre...caen Ninive y Babilonia, Menfis y Jerusalem, Ur ya era una ruina para entonces. Persepolis se yergue en el orgullo del desierto y se estrella contra escudos griegos, 300 espartanos siembran terror en los hijos del desierto, el primer maratón y la fina filosofía disputan su lugar en las mentes...Los dioses copulan ruidosamente en el mundo que aún vive en la sublime posibilidad de las cosas. Flechas partas y gritos de guerra combinados en las retinas rojas como la esperanza. Hacia el oeste una aldea de pescadores y campesinos absorbe cultura desde un vaso etrusco y platos griegos, Roma es la luz. S. P. Q. R. Vini vidi vinci tu quoque fihli mihi? Vare Vare redde mihi legio plaudite quosque tandem Catilina? Hannibal ad portas!! Galia est onimini dux partes divide et impera princeps senatus numen dialis in vino veritas ego sum caliga sol lucet omnibus...Juliano intenta recuperar las odaliscas y los días de Baco pero todo esta perdido nuevos señores se yerguen sobre el miedo a la muerte...las ruinas viven aun hoy entre los códigos de preciosos edificios...vagan hordas rubias en los fértiles campos del vino, los hijos del martillo, los que beberán y comerán hasta saciarse cuando mueran en combate, refinan su barbarie y abandonan el banquete celestial para convertirse en piadosos y anchos caballeros...en el este, los Ángeles del desierto han escuchado la palabra del profeta y se levantan para recorrer el mundo, álgebras cimitarras y astrolabios, sus ciudades de estrechas calles y grandes bazares resguardan a los viejos verborragicos del ágora. El odio entre monoteístas es mil veces superior al odio entre los huérfanos de miles de dioses, sin embargo se juntan en la dorada Hispalis, se traducen y se leen ávidos de conseguir nuevas armas. Jerusalem se llena de sangre una vez más. Paris reclama la bruma escarlata de Babilonia y la consigue, vemos hacia atrás con amor goliardo…los campos se llenan, la vida no se endurece porque no se puede endurecer la roca. Sobre el Caribe la sangre se mezcla. Los cuchillos de Jade abren torsos espolvoreándolos con chocolate, mil especies de maíz mantienen un imperio en las nubes. Muerte de Plata, diablos en las galerías de la gigantesca mina. En el Albión encuentran la salida a tan poco provechosa posición, el alma insular dominara con aroma a mar y mercancía del humo, la gran Bestia ha nacido juntando en su cabeza todos los cuernos de las bestias que ya han muerto, el metal filoso ya no es una espada sino una moneda…A la Bastilla, revolución, girondinos lubricando el fin y jacobinos lacerando hacia delante, El Marques nos muestra las pasiones que se esconden entre mierda, sangre y semen…silenciosos gritos de independencia preparan al nuevo imperio, el Cincinato de América coloca la piedra basal del nuevo imperio uniendo el sarcasmo y la muerte en los rozagantes rostros de la democracia…canta Walt y aún así, equivocado, sus palabras entran en nuestro torrente. En la isla desvencijada e insignificante nace el hombre que será invencible aún después de Waterloo, ¿Quién no tuvo un Waterloo después de él? Vístanme despacio que tengo prisa…la vieja Germania nos dará que pensar, que oír, Ostermark, Nacht Musik, Rondo alla Turca, Sinfonías del sordo que no necesitara oídos... románticos faustos jugando a Wilhem Tell, Kant, Hegel y el dueño de las almas jóvenes, la barba que tapa las chimeneas del mundo llamando a las espaldas cansadas de todo el orbe a unirse tras el fantasma. En Balaklava un inútil convierte a mil hombres en héroes. El inútil vive y los héroes mueren… Y sigue la sangre, siempre la sangre en carrera hacia la primera gran acumulación de panteones, como nunca antes vimos…Trincheras y gas, los niños dándose la mano sobre pilas de cadáveres y aún vuelan los barones con códigos de caballeros en los teutónicos sobacos…al medio aparecen las luces que aun no hemos superado…los salmos rojos parecen ser la esperanza hasta que la libertad y la vida se manchan el vestido con sangre que no era vertible, sangre de sus propios hijos. No me refiero a los ruidos de Ekaterimburgo, ni siquiera a los adolescentes cosacos lanzados a la muerte por condes gordinflones…No. Todo vuelve al curso normal, el río que cruza Sebastopol también se hiela por muchos inviernos más…Dada, nuestro prolífico padre hoy muerto, la locura y el gran masturbador, minotauros, el cáncer y los trópicos, el viejo Ezra viajando hacia el sol de Toscana con una camisa negra y la cabeza llena de cantos…muchos que mi lengua no olvidan pero que trepidan en los dinamos de la noche musgosa… Suena un disparo en Granada y la mosca se aleja del torero…El martillo de Thor se eleva de nuevo y golpea la nieve asentada en los oscuros dictados de monjes oscuros y las pardas camisas dan el primer muestreo de lo que vendrá… El águila y los dos truenos muerden al mundo, ese un charco de sangre, antes y ahora, ayer mañana y el siglo que viene…pero no es repetición ¡¡mira!!... Ahora y siempre, la sangre es el aceite del motor y la mueca de nuestra risa… la justicia poética hace una delivery y el primero que ve el espacio es un socialista…en la selva se vierte sangre de Milwakee, Texas o Kansas, el bambú infectado es por una vez más efectivo que el gas mostaza. América tiene sus barbas esperanzadas pero suena un disparo en Bolivia y la red de neón se siente aliviada, 4 años antes el asesino escondido en la biblioteca apunta la mira y suena un disparo en Dallas, el asesino se esconde en un cine y la sangre árabe no se contiene en los Altos del Golan…el mundo se prepara para la oscuridad y la resistencia cae ahogada en el silencio, silencio de cuenta corriente, cheques y plan en cuotas, cínicos años del monedero y antiparras de oro… Laberintos, gigantescos laberintos de espejos, de metal bruñido, de vida transmitida y sponsoreada, ¡¡que tranquilidad!! - dicen los peregrinos, hasta que los ángeles del Corán llenan de fuego las piernas de Jefferson y los pájaros de acero cagan bombas en la vieja tierra de los califas…la garganta se seca y algunos, desesperados intentan ver las colinas verdes, intentan aferrarse al sueño de las maños callosas, otros saben que no deben mirar o directamente no miran. Ni siquiera atisban la nube de desperdicios que vuela sobre el mundo.
La máquina de Dios NO existe…